Ayer, día 13 de diciembre, volvimos al teatro Palenque. Cantar los villancicos siempre está bien, pero, como cada año, nos alegra la venida de un niño recién nacido que viene a traer esperanza. Es un momento en el que recordamos que el Evangelio es la raíz de nuestro colegio: La Buena Noticia es la raíz.
Y ahí estábamos de nuevo. Madres y alumnos, ilusionados. El coro en el que se decidió que todo el mundo cabe, sin selección alguna, cantó como somos: y somos La Salle.
“Juntos mejor” se materializó en el escenario: todos estábamos allí: alumnos, profesores, administración, mantenimiento, limpieza…
Compartimos con Agustinas y Santo Domingo. Todos distintos, diferentes. Pero ayer, fuimos una sola voz.
Que no pare la música. Ni dejemos de ser niños, pastorcillos yendo al encuentro de la Esperanza: La luz de Belén.
Chito Morales.